Como sindicato buscamos equipar y regularizar la jornada laboral para trabajadoras de casa particular, tanto para las trabajadoras puertas adentro, como las que trabajan puertas afuera. Pese a estar regularizada las 12 horas de las trabajadoras puertas afuera, con 3 horas de descanso, eso no se da en la realidad; Si hablamos de las Trabajadoras de Casa Particular puertas afuera la situación se complica más, nosotras sabemos cuándo nos levantamos, pero no sabemos cuándo nos vamos a acostar, tenemos extensas jornadas de trabajo con un descanso mínimo de 9 horas ininterrumpidas.

Entrevista a Ruth Olate, Presidenta del Sindicato de Trabajadoras de Casa Particular-SINTRACAP, en el reportaje «Trabajo decente, en las cuerdas» del Observatorio de Género y Equidad

…»El gobierno ha celebrado los empleos creados bajo su administración y la tasa de participación económica de las mujeres»…

¿Cuál es su diagnóstico de la realidad laboral de los trabajadores chilenos en general, y de las mujeres, en particular?

En nuestro sector, el trabajo doméstico es desarrollado principalmente por mujeres. Sin embargo, reconocemos que existe una fuerte discriminación. No hay igualdad en los sueldos y no se valora de la misma forma el trabajo que desempeñan hombres y mujeres. Esta realidad que observamos en Chile, también la apreciamos en otros países y la constatamos cuando participamos en encuentros internacionales como representantes de SINTRACAP. El trabajo doméstico se sigue pensando como una tarea liviana, que no aporta al beneficio del país, en consecuencia es muy poco valorado.

¿Cuál es la agenda que su sindicato tiene para enfrentar estos temas?

Es una lucha que hemos dado por años. Nuestro trabajo es digno, las condiciones son indignas, y ese ha sido nuestro eslogan para hacer valer nuestros derechos como trabajadoras de casa particular. Nosotras insistimos en que nuestra labor tiene que estar equiparada a la de los hombres, en igualdad de condiciones.

Para impulsar nuestra agenda, hemos tenido conversaciones con el Ministerio del Trabajo. Uno de nuestros grandes temas ha sido la jornada laboral. Somos mujeres y tenemos familias a la cuales cuidar, entonces buscamos equipar nuestra jornada laboral a la de las y los trabajadores del país. A raíz de esas conversaciones logramos modificar la propuesta inicial del Ministerio del Trabajo sobre modificación de jornada y llegar a un acuerdo que posteriormente fue plasmado en un proyecto de ley ingresado por el Presidente Piñera en mayo de este año.

Hemos estado participando como SINTRACAP, junto al Observatorio de Género y Equidad, en la Comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados, instancia donde se analiza el proyecto que modifica la jornada de descanso de las trabajadoras de casa particular y en la cual hemos expuesto nuestras demandas. Para nosotras es clave tener un contrato de trabajo claro y la fiscalización correspondiente.

Las reivindicaciones de las mujeres ¿son consideradas en la agenda de peticiones de las centrales de trabajadores? 

Lamentablemente, nuestras demandas no son recogidas. La Central Unitaria de Trabajadores, CUT, por ejemplo, no nos representa como trabajadoras de casa particular. De hecho la CUT, no sabe qué es el trabajo doméstico y así lo ha reconocido su propio presidente.

Nosotras, como sindicato, hemos expuesto ante el Ministerio nuestras demandas y peticiones, hemos sido las actoras en los procesos de negociación. Incluso cuando quisimos ir a Ginebra para participar en la Conferencia que discutía el Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo, OIT, no fuimos acogidas.

¿Qué medidas considera urgentes para mejorar las condiciones de trabajo de las mujeres Trabajadoras de Casa Particular?

Como sindicato buscamos equipar y regularizar la jornada laboral para trabajadoras de casa particular, tanto para las trabajadoras puertas adentro, como las que trabajan puertas afuera. Pese a estar regularizada las 12 horas de las trabajadoras puertas afuera, con 3 horas de descanso, eso no se da en la realidad; Si hablamos de las Trabajadoras de Casa Particular puertas afuera la situación se complica más, nosotras sabemos cuándo nos levantamos, pero no sabemos cuándo nos vamos a acostar, tenemos extensas jornadas de trabajo con un descanso mínimo de 9 horas ininterrumpidas. Es por eso insistimos no sólo en la igualación de jornada al resto de las y los trabajadores, sino que especialmente en una mayor fiscalización al cumplimiento de éstas y en un contrato que , establezca claramente cuáles serán las tareas y donde se realizarán éstas. En este contexto, un tema urgente es la ratificación del Convenio 189 de la OIT y su recomendación 201, que vendría a poner las normas mínimas para tener un trabajo decente para las trabajadoras de casa particular en Chile. No tengo clara la voluntad política de este Gobierno para ratificar este convenio que fue firmado por sus representantes en Ginebra.

Como sindicato nos ha tocado conocer la experiencia de otros países. En Chile existen normas laborales de mayor avance si miramos la realidad regional ya que en algunos países no existe ni siquiera el salario mínimo para las trabajadoras de casa particular, pero esa situación no puede establecer un techo que no permita seguir igualando nuestros derechos laborales al del resto de las y los trabajadores del país.

Finalmente, ¿Cómo llegan las mujeres a la dirigencia sindical y cómo ha sido su proceso?

Es un trabajo que realizo con gusto, pero existen muchas preocupaciones. El trabajo sindical o en nuestro sindicato no es un remunerado, de hecho tenemos que trabajar para mantenernos, de lo contrario no podríamos hacer las tareas que nos fijamos. Por ejemplo, en mi caso, para poder levantar el sindicato de trabajadoras de casa particular y mostrar lo que hacemos, hemos tenido que dejar varias cosas de lado, dedicar bastante tiempo para sacarlo adelante y eso es bien duro, pero gratificante al mismo tiempo.